Hemos probado el VSG Aquila Fly, un mouse inalámbrico que llega con el sensor PIXART PAW3335DB y con un peso de solo 72g. Hoy te vamos a contar nuestra experiencia de uso, lo bueno, lo malo; pero sobre todo si vale la pena comprar este periférico de VSG, al que muchos llaman el mouse calidad/precio para gamers.
Ficha técnica del Aquila Fly de VSG
Tamaño: | 120x66x42mm |
Peso: | 72g |
Interruptor: | Omron 20 millones de clics |
Sensor: | PMW3335 |
DPI Máximo: | 16000 |
DPI predeterminado: | 400, 800, 1200, 2400, 3200, 6400 |
IPS: | 400 ips |
Aceleración: | 40g (Máximo) |
Tasa de sondeo: | 125-500-1000Hz |
Interfaz: | USB 3.0 |
Batería: | 300mAh 26 horas (según VSG) |
Tiempo de carga: | Alrededor de 1 Hora |
Precio en Perú: | S/. 219.90 soles |
Unboxing
Me tocó probar el Aquila Fly en su versión negro glossy, aunque también existe una versión negro mate. Debo rescatar que VSG ha entendido que la caja es parte de la experiencia y se nota el cariño que le han puesto al packaging.
Diseño del Aquila Fly
El diseño del Aquila Fly es tan versátil como sus accesorios se lo permitan, aunque inicialmente encontramos un posa mano del estilo panal de abeja, que le permite pesar solamente 72 gramos, este se puede intercambiar por un posa mano tradicional que también se incluye en la caja o que puedes comprar por separado en el color que desees.
Lo mismo pasa con casi todas las partes del mouse, ya sea la carcasa de los botones derecho e izquierdo, el botón del DPI y los pies skates de la parte inferior, un detalle que agradecerás muchísimos si eres de los que les gusta personalizar al máximo sus periféricos.
Lo que más me ha gustado es su cable paracord de 1.8 metros, que llega con un conversor de USB C a USB A, que me ha resultado de gran ayuda para tener el receptor cerca del mouse y así evitar cualquier interferencia, y también porque en caso se acabe la batería solo debo conectarla y seguir jugando.
El glossy es el punto más flaco de este diseño, es un imán de huellas y se nota mucho más en verano. No lo he probado dejándolo caer, pero tiene un aspecto de fragilidad que me hizo tener más cuidado cuando no lo tenía cableado.
Experiencia de uso
Para empezar a contar mi experiencia de uso debo confesar que mi mouse principal es el Basilisk Essential de Razer. Ahora sí, al ser un mouse bastante liviano, mis primeras impresiones fueron un tanto extrañas. Pero no demoré más de 40 minutos en adecuarme a su peso, por lo que si juegas Dota 2 o Valorant échale unas partidas de práctica antes de jugar alguna clasificatoria, me lo agradecerás.
Al tener un tamaño promedio, agradecí la ubicación de sus dos botones laterales, porque me permitió usar ambos sin tener que estirar o reubicar el pulgar. Inicialmente pensé que al ser modular y tener la carcasa de botones intercambiable tendría problemas de precisión o clicks fantasmas, pero no he tenido ninguno de los dos problemas.
Ahora en cuanto el movimiento, por defecto trae: 400, 800, 1000, 2400, 3600 y 6400 de DPI, que se puede configurar a tu gusto e incluso añadirle un color a cada cifra que es visible en la rueda del ratón. Este tipo de detalles resultan súper útiles si compartes la PC con otras personas y cada uno quiere una velocidad específica.
Aunque no cuenta con tecnología bluetooth, no me ha presentado ningún problema de desconexión; eso sí, como ya dije, he mantenido el receptor cerca al mouse gracias a su cable paracord.
Software de VSG
El punto a favor es que el Aquila Fly trae su propio software de personalización.
El punto en contra, no es tan “gamer” como debería; me explico, si lo comparo con otras marcas como Razer, por ejemplo, tenemos una plataforma práctica, pero no más.
No me confundas, tiene lo necesario. Podemos configurar el uso de cada botón, determinar el DPI y asignarle un color, personalizar la sensibilidad del ratón, la velocidad de desplazamiento e incluso la velocidad del doble click, podemos crear macros, importar y asignar perfiles y configurar sus colores RGB, aunque con ciertos límites.
En conclusión, tenemos un software bastante decente pero que podría mejorar con un poco más de cariño a su apartado visual.
Batería
Ahora veamos la autonomía. VSG asegura 26 horas de uso de manera inalámbrica, aunque no especifica bajo qué condiciones. Desde mi experiencia he tenido más de 12 horas de uso duro y parejo, hasta que la rueda del ratón se puso roja indicando que era necesario recargarlo.
Ahora con un uso más equilibrado, o sea manteniéndolo en reposo en varios momentos, he llegado hasta 18 horas sin problemas. Su batería de 300mAh la he podido recargar del 10% al 100% en poco menos de 1 hora.
Un puntazo del Aquila Fly es que su batería de litio también es intercambiable, aunque no he encontrado en su web si venden el repuesto por separado.
Skins Intercambiables del Aquila Fly
Como ya dije la personalización es la piedra angular del Aquila Fly. No solo podemos cambiar su patrón de luces, sino toda la skin del mouse a tal punto de tener prácticamente otro mouse en minutos, y es que VSG, para este mouse inalámbrico, vende skins de diferentes colores.
Como ya dije el Aquila Fly nos da una sensación de fragilidad, pero a pesar de eso, intercambiar las diferentes piezas es bastante sencillo, con un poco de presión ya lo tienes.
Me parece un gran punto pero también una gran debilidad, ya que varias piezas internas, como el cable de la batería por ejemplo, quedan expuestas durante el intercambio. Creo que deberían corregir ese punto en próximas generaciones.
Lo bueno y lo malo del Aquila Fly de VSG
Como siempre te voy a contar lo que me gustó y lo que no me gustó tanto del Aquila Fly.
Lo bueno
- Un mouse inalámbrico bastante ligero, con iluminación RGB y varias características personalizables que se agradecen bastante.
- Tener la opción de intercambiar de skin y que traiga repuestos de los skates es un puntazo.
- Su precio lo hace una de las opciones más competentes del mercado.
Lo malo
- La versión Glossy termina siendo una mala experiencia cuando terminas de jugar, porque vas a tener que limpiarla constantemente.
- Que ciertos cables y piezas internas queden expuestas al intercambiar sus skins es un detalle que deben corregir.
- Un poco más de cariño visual a su software nunca estaría de más.
¿Vale la pena comprar el Aquila Fly?
El Aquila Fly puede jalar la vista por cómo se ve o qué tanto puede personalizarse, pero luego de 2 semanas de uso puedo decirte que su rendimiento ha terminado dejando en el cajón a mi Basilisk Essential de Razer.
No es un periférico premium y tampoco creo que pretenda serlo, pero sí creo que tiene lo justo para convertirse en el calidad/precio de los mouse gamers. Teniendo en cuenta que VSG es una marca joven, creo que con el Aquila Fly ha sabido hacer su trabajo.
Si estás pensando en comprarlo o comprárselo a alguien en un rango de precio de los 220 soles, ve por él sin dudarlo.
Reseña y análisis del VSG Aquila Fly
VSG ha sabido construir un gran referente para el calidad/precio en el mercado peruano. Si buscas un mouse gamer que puedas ajustar a tu personalidad y que tengas las 3B, el Aquila Fly es una gran opción.
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Diseño:
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Autonomía:
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Software:
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Rendimiento:
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Conexión: